Moscú impuso sanciones a Turquía como resultado del derribamiento que hizo la fuerza aérea de ese país del avión ruso Su-24 en días pasados. Entre otras son la cancelación de actividades de empresas rusas que se hallan bajo jurisdicción turca; prohibición a empresarios rusos contratar a ciudadanos turcos, así como la suspensión de colaboración con el sector turístico bilateral; del mismo modo la cancelación de vuelos charter entre ambos territorios y la suspensión de exención de visado para personas nacidas en la nación euroasiática. teleSUR